Las muelas del juicio son las últimas en salir en la dentadura pero, según algunas investigaciones, no en todos los casos es necesario extraerlas. No obstante, eso dependerá de la opinión de tu odontólogo.
Cuando estas muelas no vienen derechas, pueden provocar el desplazamiento del resto de los dientes, y en este caso sí que se hace necesaria la extracción. Pero, si no interviene en la posición del resto de piezas de la boca, no tiene por qué ser necesario retirarlas.
Si los terceros molares crecen en diagonal, impactan en el hueso y mueven los dientes de su posición, lo que puede derivar en una apertura en las encías que más tarde podría conllevar infecciones y complicaciones varias.
¿Cómo hemos de proceder entonces?
En primer lugar, detecta si efectivamente las muelas están creciendo. Después, si percibes dolor y movimiento de las piezas dentales, acude a por una radiografía y pide cita con tu odontólogo, para cerciorarte de su extracción.
Pero si las muelas ya han salido y movieron tus dientes, puedes acudir a las ortodoncias y, cuando acabe el tratamiento, el odontólogo las extraerá sin procedimiento quirúrgico.
En resumen: Existen dos opciones; la primera es que antes de que salgan se practique una cirugía de mínima invasión, cuya recuperación tarda entre tres y cinco días.