Painless Parker se pasó media vida entre pleitos judiciales o luchando por defender su legitimidad y su ética.
Beebe murió repentinamente y Parker decidió mudarse a California, donde llegó a pensar en su retirada. Pero poco después ya estaba montando nuevos consultorios. Aquí tampoco fue bien recibido, pero luchó por mejorar su reputación librando batallas legales con la Asociación Dental del Estado de California y entrenando a otros dentistas en el Instituto de Economía Dental.
En su oficina primaba la nueva tecnología frente a lujosos cuadros y alfombras, además de ofrecer a sus pacientes cepillos de dientes, polvos y enjuagues bucales para cepillarse en casa. En el año 1913 se aventuró a comprar un circo ambulante y comenzó a ejercer como su propio maestro de ceremonias. Mientras Painless Parker trabajaba sacando dientes, el resto de espectadores veían a los elefantes.
Se aventuró a presentar películas educativas acerca del cuidado bucal en su oficina, motivado por su preocupación por las bacterias y la esterilización. Todos los interesados eran invitados posteriormente a un chequeo gratis en su consultorio.
Actualmente Parker es considerado una estrella en el Museo Histórico Dental de la Universidad Temple, centro en el que estudió. Su oficina más grande, situada en la ciudad de Los Ángeles, aún funciona actualmente como un consultorio de odontología.
Fuente: bbc.com