Probablemente la extracción de las muelas del juicio se haya convertido en la cirugía más extendida de la boca. A pesar de que su intervención ya se ha generalizado, existe un consenso entre los dentistas y cirujanos maxilofaciales de individualizar y analizar cada caso porque hay personas con las cuatro muelas del juicio que no han tenido nunca ningún problema, ni lo tendrán, o bebés que directamente han nacido ya sin ellas, como detalle evolutivo.
Las muelas del juicio salen en torno a los 18 años, momento en el que suelen surgir los problemas, a pesar de que generalmente no dar dolor al salir. Sobre cuándo conviene retirarlas, el experto precisa que cuando empiecen a molestar, aunque siempre estudiando cada caso. “Se aconseja una revisión al año y hay una serie de condicionantes. Siempre se banaliza la extracción de los cordales pero hay que tener en cuenta que se trata de una cirugía donde hay tejidos duros y blandos que pueden conllevar consecuencias indeseables para el paciente. Por ello, desde el sector se insiste en que se valore cada caso particular.
Desde la Sociedad Española de Cirugía Bucal (SECIB) se precisa que los principales motivos para la extracción de los cordales son: una caries o inflamación de las encías debido a una pericoronaritis, una enfermedad bucal que se produce cuando no hay bastante espacio para que salga la muela y se provoca inflamación del tejido blando que la recubre; y también cuando hay un quiste, un tumor. En cambio, los motivos que no justificarían su extracción son por ejemplo porque hay poco espacio para que salgan los dientes y ha tenido lugar un apiñamiento dental .
Por otro lado, también es discutible cuando hay una enfermedad en las encías como la periodontitis, una pérdida del soporte óseo de los dientes. Se ha dicho que las muelas del juicio pueden actuar de reservorio de microorganismos para la enfermedad el paciente, pero no es un motivo establecido.
La Sociedad Española de Cirugía Bucal (SECIB) se basa en la guía de extracción de muelas del juicio elaborada por el Instituto Nacional de Salud británico (NICE, por sus siglas en inglés) que dicta también que, cuando hay más de un episodio de inflamación de esa muela del juicio es cuando sí está indicado extraerla.
Por útlimo, el SECIB aconseja que, en caso de dolor, se acuda siempre al dentista para que revise la boca. Normalmente lo más aconsejable es tomar medicación para el dolor como analgésicos o antiinflamatorios, o extremar la higiene bucal. La administración de antibióticos en la mayor parte de casos no es necesaria, a no ser que haya infección clara, pero lo determinará dentista.
Fuente: Infosalus