Los implantes dentales son una solución popular y eficaz para reemplazar dientes perdidos. Sin embargo, aunque la mayoría de los procedimientos son exitosos, existe la posibilidad de que se produzca un rechazo del implante. Entender las causas de este rechazo es crucial para tomar medidas preventivas y asegurar el éxito del tratamiento. Hoy, desde Dental Icaria, os hablamos de ello.
¿Por qué se producen los rechazos de implantes dentales?
- Infección: Una de las principales causas de rechazo de los implantes dentales es la infección en el sitio del implante. Esto puede ocurrir si no se siguen adecuadamente las prácticas de higiene bucal o si las bacterias invaden el área durante o después del procedimiento. Las infecciones pueden impedir que el implante se integre correctamente con el hueso.
- Falta de osteointegración: La osteointegración es el proceso mediante el cual el implante se fusiona con el hueso maxilar. Si este proceso falla, el implante puede no establecerse de manera firme. Esto puede deberse a la calidad del hueso, la técnica quirúrgica utilizada o factores biológicos individuales.
- Reacciones alérgicas: Aunque raro, algunas personas pueden tener una reacción alérgica al material del implante, generalmente al titanio. Esta reacción puede causar inflamación y rechazo del implante.
- Sobrecarga: La sobrecarga ocurre cuando el implante soporta más presión de la que puede manejar. Esto puede ser debido a una colocación incorrecta del implante, una prótesis mal ajustada o hábitos como el bruxismo (rechinar los dientes). La sobrecarga puede llevar a la fractura del implante o del hueso circundante.
- Enfermedades sistémicas: Condiciones médicas como la diabetes no controlada, enfermedades autoinmunes o trastornos que afectan la cicatrización pueden aumentar el riesgo de rechazo del implante. Estas enfermedades pueden interferir con el proceso de curación y la integración del implante.
- Hábitos nocivos: Fumar es uno de los principales factores de riesgo para el fracaso de los implantes dentales. El tabaco afecta negativamente la circulación sanguínea y la cicatrización, lo que puede impedir la correcta osteointegración del implante.
- Falta de mantenimiento: Una vez colocado el implante, es crucial mantener una buena higiene bucal y seguir las recomendaciones del dentista para el cuidado postoperatorio. La falta de limpieza y las visitas irregulares al dentista pueden conducir a la periimplantitis, una inflamación que afecta los tejidos alrededor del implante y puede causar su fracaso.
Por todo ello, os recomendamos que, en caso de que notéis algún síntoma de rechazo tras la puesta de un implante dental, pidáis cita a nuestro equipo para que podamos ayudaros.