Los peques pasan muchas horas en el colegio. Por eso, es importante que estén concienciados a nivel individual sobre su salud bucal para que no descuiden su higiene y afrontar el curso con la mejor sonrisa.
En el caso de los más pequeños, de dos a seis años, es importante realizar la higiene bucal en casa después de desayunar, ya que ésta debe ser supervisada por un adulto para que no exista riesgo de que el niño se trague la pasta dentífrica y aprenda una técnica de cepillado adecuada. A esta edad los niños no serán del todo eficaces, por lo que es necesario que los padres repasen el cepillado. Es muy importante ser constante para adquirir el hábito y una buena manera es hacerlo siempre en el mismo momento, justo antes de salir de casa, por ejemplo, para que nunca se le olvide.
Una alimentación saludable es fundamental para que los niños rindan intelectual y físicamente en la escuela, por lo que recomendamos que se lleven una pieza de fruta para comer a media mañana o bien un pequeño bocadillo de pan integral. Es mejor evitar los bollos y otros procesados industriales que contienen una alta cantidad de azúcares que no sólo son malos para sus dientes, ya que provocan caries, sino para su salud en general. Tampoco son recomendables los zumos envasados o batidos preparados.
Si se quedan a comer en el cole será difícil que un adulto pueda supervisar su cepillado, así que si la comida puede finalizar con otra pieza de fruta entera y con piel, como una manzana, mejor. Esto fomentará la salivación y ayudará a neutralizar los ácidos causantes de la caries, aunque cabe recordar que nunca sustituye al cepillado dental.