Los ‘dientes de tiburón’ aparecen cuando los incisivos erupcionan antes de caerse los de leche, creando así esta curiosa doble fila de dientes.
A pesar de la espectacularidad de su apariencia, tener ‘dientes de tiburón’ no es un problema grave y afecta a uno de cada diez niños. Cuando las piezas dentales de leche y permanentes coinciden, es recomendable hacer una visita al dentista para asegurarse de que todo está bajo control y no poner en riesgo la salud dental del niño o niña.
Normalmente, con sacar las piezas dentales de leche es suficiente: la lengua suele realizar todo el trabajo y las piezas dentales permanentes se colocan perfectamente en su tiempo con el paso de los meses.
Algunas de las causas que podrían dar una explicación a este fenómeno son el insuficiente espacio para la erupción del diente definitivo, anomalías genéticas o que el diente permanente lleva una dirección de erupción diferente y no reabsorbe la raíz del diente temporal.
Otras de las consultas más demandadas por los padres al dentista son las tres ‘montañitas’ o ‘piquitos’ que suelen tener los incisivos permanentes. Este caso tampoco debe preocupar, a no ser que persistan en la edad adulta, cuya causa podría ser la falta de contacto entre incisivos y superiores debido, por ejemplo, a la mordida abierta anterior.
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Fuente de texto e imagen: elnortedecastilla.es