Mantener una buena salud bucal es esencial para prevenir problemas dentales a largo plazo. Dos procedimientos comunes que a menudo se confunden son el raspado dental y la limpieza dental. Aunque ambos están diseñados para mejorar la salud bucal, tienen propósitos y enfoques distintos. Hoy, desde Dental Icaria, os hablamos de ello.
Raspado vs. limpieza dental: ¿Cuáles son las diferencias?
El raspado dental, también conocido como curetaje dental, es un procedimiento más profundo dirigido a tratar problemas más serios, como la enfermedad periodontal. Durante un raspado dental, el dentista utiliza instrumentos especializados para eliminar la acumulación de placa bacteriana y tártaro debajo de la línea de las encías, donde el cepillado y el uso de hilo dental no son tan efectivos. Este proceso ayuda a prevenir la progresión de la enfermedad periodontal y a mantener la salud de las encías.
Por otro lado, la limpieza dental es un procedimiento preventivo más suave destinado a eliminar la placa y el tártaro superficiales. Durante una limpieza dental de rutina, el higienista dental utiliza instrumentos y ultrasonido para limpiar la acumulación de placa en la superficie de los dientes y entre ellos. Este proceso ayuda a prevenir la caries dental y la enfermedad de las encías, promoviendo una sonrisa más saludable.
Aclarada la diferencia, se puede ver que ambos son clave en un régimen dental completo, y es recomendable realizar limpiezas regulares y consultar con el dentista para determinar si es necesario un raspado dental según las necesidades individuales.